Las reafirmaciones del Vaticano han ocasionado grandes aprehensiones en otros grupos religiosos.
Ciudad del Vaticano, Roma EFE
CRISTO CONSTITUYO una sola Iglesia y ésta "subsiste" en la Católica, reafirmó el Vaticano en un documento hecho público en el que reconoce que las iglesias ortodoxas y las "comunidades cristianas" surgidas de la Reforma "no están desprovistas de sentido como medios de salvación".
El documento se titula "Respuestas a algunas preguntas acerca de ciertos aspectos de la doctrina sobre la Iglesia" y fue preparado por la Congregación para la Doctrina de la Fe con el objetivo de "precisar" el significado "auténtico" de "algunas expresiones eclesiológicas magisteriales que corren el peligro de ser tergiversadas en las discusiones teológicas".
El texto está firmado por el prefecto de la congregación, el cardenal estadounidense William Levada, y aprobado y confirmado por el Papa, según se señala.
El documento está dividido en cinco preguntas con sus respuestas y en la primera se señala que el Concilio Vaticano II "ni quiso cambiar ni de hecho la ha cambiado" la doctrina sobre la Iglesia, sino que la ha desarrollado, profundizado y expuesto ampliamente.
Subraya que Cristo en la tierra sólo constituyó una Iglesia y que esa, "constituida y ordenada como una sociedad subsiste" en la Iglesia católica.
A la pregunta de por qué se usa la expresión "subsiste" y no "es", el texto precisa que fuera de la Iglesia católica se encuentran "muchos elementos de santificación y verdad, que inducen hacia la unidad católica".
El documento también se refiere a por qué el Concilio Vaticano II atribuye el nombre de "Iglesias" a las Orientales separadas de Roma y la respuesta es porque aunque separadas tienen "verdaderos sacramentos y sobre todo, en virtud de la Sucesión apostólica, el sacerdocio y la eucaristía".
Respecto a por qué la Iglesia Católica no reconoce como iglesias a las surgidas de la reforma protestante del siglo XVI y las llama "comunidades cristianas", el texto subraya que porque "no tiene la sucesión apostólica mediante el sacramento del Orden y están privadas de un elemento constitutivo esencial de la Iglesia".
El documento va acompañado de un "comentario" en el que se precisa por qué se utiliza la palabra "subsiste" y no el verbo "es".
La respuesta es que ello no significa que la Iglesia Católica "renuncie a su convicción de ser la única verdadera Iglesia de Cristo", sino que indica "una mayor apertura a las exigencias del ecumenismo, de reconocer el carácter y la dimensión realmente eclesiales de las comunidades cristianas que no están en comunión con la Iglesia Católica.
DESCONCIERTO La Alianza Reformada Mundial (ARM) expresó su "desconcierto" ante el documento publicado por el Vaticano en el que reafirma que la Iglesia de Cristo es una y subsiste en la Católica.
La ARM, que agrupa a más de 200 iglesias congregacionalistas y presbiterianas, que tienen sus raíces en la Reforma del siglo XVI, expresó su malestar en una carta enviada al presidente del Pontificio Consejo para la Unidad de los Cristianos, el cardenal Walter Kasper.
"Estamos desconcertados ante la presentación de este documento, en un momento histórico para la Iglesia cristiana", explica el secretario de la ARM, Setri Nyomi.
La ARM lamenta que se haya publicado el documento justo cuando "se iban a publicar los resultados sobre la última serie de diálogos bilaterales".
PROTESTANTES La Federación de las Iglesias Evangélicas en Italia y la Iglesia Valdese han criticado el documento hecho público hoy por el Vaticano en el que reafirma que la Iglesia de Cristo es una y subsiste en la Católica, al considerar que es un "paso atrás" y considera a los protestantes cristianos de tercera clase.
"Es un vistoso paso atrás en las relaciones entre la Iglesia Romana y las otras comunidades cristianas", manifestó el pastor Domenico Maselli, presidente de la Federación de Iglesias Evangélicas en Italia.
Maselli agregó que para la Santa Sede el único modo de lograr la unidad de los cristianos "sería entrar en la Iglesia Católica Romana".
CONSIDERACIONES
Es la segunda vez en una semana que el Papa corrige lo que considera interpretaciones erróneas del Concilio Vaticano Segundo, celebrado entre 1962 y 1965, que modernizó la Iglesia.
Los diversos grupos lamentan que no se haya tomado en cuenta "el respeto mutuo para la condición de la Iglesia'' era necesario para cualquier avance en el ecumenismo.
El documento está confeccionado en base a cinco preguntas con sus respuestas.
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