Los Reyes Magos y Papá Noel no son los únicos que reciben cartas estos días. Las oficinas postales de Jerusalén reciben a diario miles de cartas de todo el mundo dirigidas a Dios.Los remitentes piden que sus misivas sean introducidas en el Muro de las Lamentaciones, el lugar más sagrado para los judíos, para así hacer llegar a Dios sus mensajes.
Los empleados postales tratan de cumplir los deseos de los remitentes en la medida de sus posibilidades y dejan las cartas a Dios entre las desgastadas piedras del muro.
Las autoridades postales israelíes entregaron cientos de "cartas a Dios" provenientes de todo el mundo al Muro de los Lamentos en Jerusalén.
Ésta es una tradición popular judía para que Dios responda a las oraciones escritas e insertadas en las grietas del muro de 2.000 años, único resto del antiguo Templo. Todos los años, las autoridades israelíes las introducen entre las piedras.
El rabino principal del lugar llevó una caja de cartón con el letrero "Cartas a Dios", que contenía cartas de diversos países e idiomas, en inglés, ruso, francés, español y muchas lenguas más.
El rabino Shmuel Rabinovitz dijo que las oraciones "ascienden desde este lugar sagrado", y expresó el deseo de que Dios conceda los pedidos.
Y a los que no tomen esta iniciativa de dejar una oración en este viejo muro, siempre les quedará la manera más rápida, directa y no menos efectiva: la oración.
Fuente: Agencias. Redacción: ACPress.net
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